El Parque Nacional de Monfragüe ofrece un entorno espectacular, además de una lista de experiencias que hacen las delicias de los amantes de la naturaleza, las rutas de aventura y mucho más. Por eso, cada año lo visitan miles de personas.
Monfragüe es un enclave único en cuanto a naturaleza se refiere. Un espacio de alta riqueza natural, que acoge cientos de animales y plantas autóctonas en un ecosistema que le ha valido el título de Parque Nacional, siendo uno de los tesoros ecológicos mejor valorados del mundo.
Por ello, quienes disfrutan de las actividades en plena naturaleza tienen en este parque un destino ideal para descubrir sus muchos atractivos Estos son algunos ejemplos.
Rutas para todos los gustos
Una de las actividades más solicitadas en el parque son las rutas para descubrir el inmenso legado que contiene. En Monfragüe permiten recorrer incluso algunas zonas escarpadas para descubrir paisajes impresionantes tanto por su belleza como por su valor ecológico. Existen zonas espectaculares, pero quizás no demasiado conocidas para el público general, como es el caso de ruta por Serradilla en Monfragüe.
A comienzos del mes de septiembre, cuando empiezan las lluvias, en el Parque sucede un evento espectacular: la berra del ciervo. Los machos bajan a las dehesas y se enfrentan en batallas cuerno contra cuerno para impresionar a las hembras. El ruido de los bramidos y los choques de cornamentas se pueden escuchar a distancia, y con las rutas 4×4 por Monfragüe se puede llegar para observar el espectáculo.
También se puede hacer rutas a caballo, a pie o en bicicleta por varias zonas, con recorridos de dificultad variable para que todos, desde recién iniciados hasta los más experimentados, puedan disfrutar de la actividad.
Observación de aves
Monfragüe es el hogar de aves como el buitre negro, el alimoche, el buitre leonado o el Águila Imperial, entre otras. También cuenta con diversos puntos desde los que se puede observar su majestuoso vuelo, un espectáculo que merece la pena ver al menos una vez en la vida.
Además de aves de gran tamaño, en el Parque Nacional habitan grullas, rabilargos, martines pescadores y muchas otras, haciendo las delicias de los amantes de la ornitología.
Astroturismo
La observación de las estrellas tiene en Monfragüe un punto perfecto, ya que está lejos de núcleos de población y no existe contaminación lumínica. De hecho, el Parque Nacional de Monfragüe es el primer destino Starlight que se declaró en Extremadura, lo que indica que es uno de los mejores lugares del mundo para mirar al cielo por la noche y explorar el universo a simple vista.
Descubrir pinturas rupestres
En esta zona han vivido personas desde el neolítico, y dejaron su huella en forma de pinturas dentro de cuevas. Hoy, muchas de estas cuevas se pueden visitar de forma organizada, y se pueden observar pinturas rupestres a las que se les ha datado de una antigüedad de 7000 años. Los amantes de la historia tienen en estas cuevas un lugar de visita imprescindible.
Safari fotográfico
Además de aves, en Monfragüe viven cientos de animales, algunos de ellos protegidos por su escasez. Por eso, otra de las actividades que se pueden realizar es la fotografía de especies como linces, zorros, jabalíes, muflones o cabras montesas, entre otras.
La lista de actividades no termina aquí, pues en Monfragüe se pueden practicar deportes acuáticos como el barranquismo o el piragüismo, o actividades como el parapente y la escalada.
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