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Artritis reumatoide
¿Qué es la artritis reumatoide? La artritis reumatoide (AR) es una enfermedad sistémica que ataca a múltiples articulaciones de todo el cuerpo. Alrededor del 90% de las personas con AR acaban desarrollando síntomas relacionados con el pie o el tobillo. Por lo general, los síntomas aparecen primero en los dedos y en la parte delantera del pie, y luego
en la parte media y posterior del pie, y finalmente en los tobillos. Otros tipos de artritis inflamatoria que afectan al pie y al tobillo son la gota, la espondilitis anquilosante, la artritis psoriásica y el síndrome de Reiter. Algunas personas pueden ser más propensas a desarrollar AR debido a sus genes. Sin embargo, suele ser necesario un desencadenante químico o ambiental para activar la enfermedad. En la AR, el sistema inmunitario del cuerpo
se vuelve contra sí mismo. En lugar de proteger las articulaciones, el cuerpo produce sustancias que atacan e inflaman las articulaciones.SíntomasLos síntomas más comunes de la AR en el pie son dolor, hinchazón y rigidez. Los síntomas suelen aparecer en varias articulaciones de ambos pies. Se puede sentir dolor en la articulación o en la planta o el pulpejo del pie. La articulación puede estar caliente y afectar a la forma de caminar.
Ejercicios para la artritis reumatoide en los pies
La AR provoca una inflamación en el revestimiento (membrana sinovial) de las articulaciones, sobre todo en las de las manos y los pies. Los signos de inflamación pueden incluir dolor, hinchazón, enrojecimiento y sensación de calor alrededor de las articulaciones afectadas. En algunos pacientes, la inflamación crónica provoca daños en el cartílago y los huesos de la articulación. Los daños graves pueden conducir a la destrucción permanente de la articulación, a la deformidad y a la discapacidad.
Cuando las articulaciones se inflaman debido a la AR, la membrana sinovial se espesa y produce un exceso de líquido articular. Este exceso de líquido, junto con las sustancias químicas inflamatorias liberadas por el sistema inmunitario, provoca hinchazón y daños en el cartílago y los huesos de la articulación.
Los problemas de los pies causados por la AR suelen producirse en la parte delantera del pie (la bola del pie, cerca de los dedos), aunque la AR también puede afectar a otras zonas del pie y del tobillo. Los signos y síntomas más comunes de los problemas del pie relacionados con la AR, además de la aparición anormal de deformidades, son el dolor, la hinchazón, la rigidez articular y la dificultad para caminar.
Mientras que el tratamiento de la AR se centra en la medicación prescrita por el médico de cabecera o el reumatólogo del paciente, el cirujano de pie y tobillo desarrollará un plan de tratamiento destinado a aliviar el dolor de los problemas del pie relacionados con la AR. El plan puede incluir una o varias de las siguientes opciones:
Dolor de talón por artritis reumatoide
Las articulaciones rígidas o doloridas por estar demasiado tiempo sentadas en una posición extraña tienen una fácil solución, pero ¿qué ocurre cuando la causa proviene del interior; de su propio cuerpo? Esta es la realidad a la que se enfrentan muchos enfermos de artritis reumatoide (AR). Es una enfermedad que puede afectar a las articulaciones de todo el cuerpo, pero más del 90% de las personas que la padecen experimentan síntomas en los pies y los tobillos a medida que la enfermedad avanza. Para alrededor del 20% de los enfermos, los pies y los tobillos son los primeros lugares en los que comienza a notarse la enfermedad.
Las articulaciones están recubiertas por un revestimiento protector llamado sinovia, que proporciona la lubricación necesaria para facilitar el movimiento. Cuando el propio sistema inmunitario del cuerpo se vuelve contra sí mismo, puede hacer que la membrana sinovial se vuelva hiperactiva, se hinche y se inflame. Lo que antes protegía la articulación ahora la destruye lentamente. Los tejidos que rodean la articulación, como los ligamentos, también pueden verse afectados por esta enfermedad y deteriorarse.
Actualmente no se conoce la causa exacta de la AR. Los antecedentes genéticos se consideran una posible razón, ya que las personas parecen más propensas a desarrollar la enfermedad si otros miembros de la familia la han padecido. Sin embargo, muchos médicos creen que la genética por sí misma no es suficiente y que algún tipo de desencadenante químico o ambiental pone en marcha la enfermedad en quienes la han heredado.
Problemas de los pies en la artritis reumatoide
La artritis es una inflamación en la articulación resultante de la degeneración del cartílago que provoca dolor, hinchazón y rigidez en la articulación, con la consiguiente limitación de movimientos. La artritis de la articulación del pie y del tobillo puede producirse debido a fracturas, dislocaciones, enfermedades inflamatorias o deformidades congénitas. Las articulaciones del pie más comúnmente afectadas por la artritis son:
La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunitario del cuerpo (la forma que tiene el organismo de luchar contra las infecciones) ataca a sus propias articulaciones, tejidos y órganos sanos. Puede causar dolor, rigidez, hinchazón y pérdida de función en las articulaciones. La artritis reumatoide afecta sobre todo a las articulaciones de las manos y los pies y tiende a ser simétrica. Esto significa que la enfermedad afecta a las mismas articulaciones en ambos lados del cuerpo (por ejemplo, ambos pies) al mismo tiempo y con los mismos síntomas.
La artritis reumatoide suele producirse cuando los genes responsables de la enfermedad son desencadenados por una infección o por cualquier factor ambiental. Con este desencadenante, el mecanismo de defensa del organismo produce anticuerpos contra la articulación, lo que puede dar lugar a la artritis reumatoide.
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